
México.- La hospitalización de Alejandra Guzmán por una infección derivada de un mal trabajo estético en sus glúteos y el arresto de la mujer que dirige la clínica donde se realizó el tratamiento ha destapado un patrón de irregularidades en centros donde se ofrecen este tipo de servicios sin los debidos permisos y preparación médica, y donde se ha denunciado hasta un caso de violación.
La llamada “Reina del Rock”, hospitalizada desde la semana pasada, esperó hasta el miércoles para confirmar que su cuadro clínico se complicó a raíz en un mal procedimiento estético realizado en la clínica de Valentina de Albornoz.
De Albornoz, reconocida por atender a celebridades, fue arrestada el martes bajo sospechas de que cometió los delitos de lesiones, fraude y asociación delictuosa.
Cuatro empleados más de su clínica están bajo investigación y adicionalmente se busca a un hombre identificado como doctor del lugar que habría violado a una de las clientas, según denuncias presentadas ante el Ministerio Público.