La separación de Tom Cruise y Katie Holmes fue una de las noticias que centraron el inicio del verano. La petición de divorcio que hizo la actriz a principios de julio se ha concretado con la firma de los papeles que ponen fin al matrimonio de cinco años entre Cruise y Holmes.
Se trata de un divorcio en tiempo récord que, además, contó con la firma de un acuerdo para mantener al margen a la hija de ambos, Suri (de 6 años). Y es que en cuanto se supo la noticia, las imágenes de la niña eran el foco de atención de todos los paparazzis. De esta forma, los actores se comprometieron a no hablar públicamente sobre los acuerdos que alcanzaran sus respectivos abogados y se especuló con la manipulación que la cienciología hacía de la pequeña.
Katie Holmes obtuvo entonces la custodia provisional de la niña y, después de conocerse el divorcio de forma oficial, se ha filtrado que la actriz mantendrá la tutela exclusiva y defitiva de Suri con un «extenso régimen de visitas» por parte de Tom Cruise.
Suri está afincada con su madre en Nueva York desde primeros de julio, donde ya ha sido matriculado en un colegio privado e inscrita en una iglesia católica. Aún así la pequeña ha podido disfrutar de Tom Cruise, quien se ha comprado un jet privado para viajar hasta la ciudad de los rascacielos y ver a su hija.
Una vez finalizada toda relación entre la pareja de actores, Katie Holmes ha pedido disculpas a Tom Cruise por haberle sometido a «presión» y haberle humillado: «Katie le ha pedido disculpas. Se siente mal por la forma en la que se estaba desarrollando todo y eso le avergonzaba. Pero dudo que puedan llegar a ser amigos», ha comentado una fuente a «Showbiz Spy». (ABC.ES)
