Moscú
Félix Sánchez había señalado a Jehue Gordon como el favorito para ganar la final de los 400 metros en el Mundial de atletismo, y atinó.
Tras un demoledor empuje en la recta final, el trinitario de 21 años se estiró sobre la meta para superar estrechamente al estadounidense Michael Tinsley.
Lo triste para Sánchez es que no pudo hacer realidad su ambición de ganar un tercer oro en los mundiales, y el astro dominicano tampoco pudo encontrar consuelo con otros colores en las preseas.
“Estoy vivo”, comentó Sánchez, el campeón olímpico en 2004 y 2012, y que buscaba conseguir la mayor cantidad de títulos mundiales en la disciplina. “Se me fue el ritmo tras la segunda valla. En este nivel no se puede cometer errores y menos dos. Me costó una medalla”.
Gordon cronometró 47.69, superando por una centésima a Tinsley, ganador de la plata olímpica el año pasado. El serbio Emir Bekric se llevó el bronce con 48.05.
“Ahora quiero ser campeón de los Panamericanos, quiero ser campeón olímpico”, dijo Gordon. “Esta victoria me va cambiar la vida, pero no me cambiará como persona”.
Sin latinos
La final ofrecía la posibilidad de un podio conformado por representantes de las Antillas de habla española, pero los tres entraron en orden más atrás.
El cubano Omar Cisneros quedó cuarto con 48.12, seguido por Sánchez (48.22) y el puertorriqueño Javier Culson (48.38).
Culson quedó fuera de la repartición de medallas tras conseguir sendas preseas de plata en las dos ediciones anteriores y el bronce en los Juegos de Londres.
Evidentemente enfadado con su resultado, Culson declinó dar declaraciones.
Falló a sí mismo
Sánchez, por su parte, caviló sobre su pasado, presente y futuro.
Habló de sentirse orgulloso por una carrera cargada de gloria deportiva para la República Dominicana, una trayectoria que emprendió con el Mundial de Sevilla 1999.
Ofreció lujo de detalles sobre lo que le costó un podio en la pista azul del estadio Luzhniki, el haber atacado la tercera valla con su pierna débil, la derecha, y no haber podido encontrar el ritmo adecuado hasta las últimas cinco.
“Eso es lo que más me duele. Tanto esfuerzo y sacrificio, de todo lo que tuve sufrir este año para llegar aquí, para fallarme yo mismo”, señaló.
Y, por supuesto, se refirió a la posibilidad del retiro.
Señaló que, aunque cumple 36 años el 30 de agosto, todavía no ha decidido si seguirá activo con la idea de llegar a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016.
“Tomaré esa decisión con tiempo y con calma”, afirmó, detallando que completará la actual temporada, viajará a su país y entonces llegará a una determinación definitiva.
“Me estoy poniendo viejo cada año y las cosas se ponen más difíciles en este nivel”, declaró.
