Muchos quisqueyanos no pudieron contener las lágrimas ante las actuaciones de las estrellas de nuestra música que desfilaron por el escenario desde las 8:45 hasta la medianoche, con el sonido impecable de una orquesta dirigida por Dionis Fernández y producción artística de Chiqui Haddad.
Entre efectos de luces, una pantalla gigante al fondo, un grupo de bailarines que lo dieron todo para que el público la pasara bien, la primera en actuar fue Miriam Cruz, quien vestida de un modo imponente, mereció la algarabía del auditorio con sus éxitos “La carnada”, “La loba”, “Te lo regalo”, “Esa loca” y “Cosa de él”.
A las 9:10 de la noche los animadores Michael Miguel y El Pachá presentaron a El Prodigio. El merenguero típico interpretó “Raquel” y “Ella me vivía”, entre otros.
Pero las ovaciones de los presentes aumentaron con la presencia de Héctor Acosta “El Torito” cuando faltaban 20 minutos para las 10:00. El artista nacido en Bonao, en el Cibao central de República Dominicana, se impuso entre merengues y bachatas con el popurrí “María Cristina”, “Margarita” y “Mis 20 años”. Con dos bailarines detrás, El Torito cantó su hit “Me voy” (“El anillo”), para seguir con “Me duele la cabeza” y “Con el corazón abierto”.
“Este es un día de celebración, es día de ustedes, la materia prima de Quisqueya. ¡Que viva la Bandera Dominicana!”, gritó Acosta con mucha emoción, para de inmediato poner a todos de pie con el merengue típico “La chiflera”.
Antes de despedirse, Héctor bajó del escenario y se mezcló con el público que lo ha convertido en uno de los más importantes artistas de República Dominicana. El Torito se marchó a ritmo de “El mujerón” y “La quiero ver”, dejando caliente a la masiva concurrencia.
Tras la pausa. Después de un intermedio de 15 minutos, “Mi música es mi bandera” continuó a ritmo de buena bachata con Frank Reyes “El Príncipe”, quien fue recibido por fuertes gritos, tras la proyección de un breve video de la historia de la llamada “música de amargue”, desde Luis Segura y José Manuel Calderón hasta Juan Luis Guerra, Romeo Santos y Prince Royce”.
“Amor desperdiciado”, “Estoy mejor sin ti”, “Amor a distancia”, “Vine a decirte adiós”, “Nada de nada”, “24 horas” y “Princesa”, bastaron para que los asistentes disfrutaran del artista nativo de Tenares.
Yanet Márquez erizó pieles. Ya a las 11:05 de la noche, a los animadores Michael Miguel y El Pachá se une otro dominicano, Alipio Cocco Cabrera. El trío presentó a la soprano no vidente Yanet Márquez, quien vestida con colores de la Bandera Dominicana, hizo una interpretación magistral de “Quisqueya”, acompañada en la guitarra por el doctor Yomare Polanco, haciendo que el público se levantara de nuevo de sus asientos.
El final. Pero las emociones continuaron en grandes escalas desde el momento que apareció un ícono de nuestra música: Johnny Ventura, haciendo ondear miles de banderitas con el merengue “Soy dominicano”.
Junto a su inseparable compañero de mil batallas, Roberto del Castillo, y un excelente sonido de la súper orquesta a sus espaldas, “El caballo mayor” dio muestras de su energía y carisma con el medley “Matildá”, “Patacón pisao” y “Mambrú se fue a la guerra”.
Y para que nadie se fuera sin mover el cuerpo, sean dominicanos, puertorriqueños, hondureños, colombianos, costarricenses, peruanos y otras nacionalidades, Ventura finalizó por todo lo alto con “Merenguero hasta la tambora” y un popurrí con “La agarradera”, “El tabaco”, Solimán” y “El pingüino” (Jorge Ramos) (Hoy)
